miércoles, 9 de diciembre de 2009

noches - hoy nadie grita

¿Como distinguir el sueño de la vigilia? O mejor: ¿sabes distinguir lo real de lo ficticio aún despierto? Yo no. Porque:

El mundo: ¿donde está? ¡Escupe!

Las alturas de la noche pueden hacer que te enfríes pero no pueden parar de sentir una eternidad de pena que se siente por todo el cuerpo, que te golpea y te hace llorar sin lágrimas. Una sensación de angustia, de perdida, y de pensar en la diferencia entre decir y no decir las palabras equivocadas. ¿Cómo se sabe donde esta el final cuando ni siquiera se sabe donde empieza todo? Y por eso es que me pierdo en el universo de conceptos. ¿Cómo saber sí el error no es acierto? ¡Qué poca seguridad me aporta el lenguaje cotidiano y que desconfianza me traen los días normales!

El tiempo: ¿y ahora qué será de nosotros?

¿Donde buscarías la sensación de cotidianidad? Sí uno no sabe muy bien como y cuando es, ¿qué aporta a la destrucción? Sí todo se deshace en la materia, ¡bienvenida sea! ¿Qué queda ya sino fundirse con lo que no es yo? Y no voy a empezar a relacionar puesto que todo sigue su cauce. ¡Horror! Yo no quiero ver mas sonrisas que la tuya no importa cuando.

El espacio: en el horizonte todo se confunde

Lo de viajar al infinito no es mala idea sí estas dispuesto a venderlo todo. Tu alma y con ello tu salvación por un instante, por la caricia del instante, por la eternidad del instante pasada y futura no sentida por la ilusión circundante y de caracteres que poseen sensación de estar en un sueño. ¿Y sí todo fuera espíritu? ¡Ojala! Podría hallar hasta lo irracional del deseo en algún lugar. Lograr enorgullecerme de ser un proscrito.


Tantas cosas podría hacer pero sigo sin encontrar el sentido. ¿Vos lo viste?

lunes, 30 de noviembre de 2009

muerte: tiempo

pasan de un lugar a otro
pasan la montaña, pasan el río
pasan los autos
pasan sin auto
pasan la mano, el peine o el cepillo
pasan la noche en un grito
pasan droga por la frontera
pasan barato o caro
pasan bueno o malo
pasan de malos
pasan por todos los líos
pasan por primavera, verano, otoño, invierno
pasan las páginas de un libro
pasan el turno
pasan la raya
pasan por tontos o pasan por listos
pasan de largo
pasan en blanco
pasan por mucho
pasan directamente
pasan de poner fichas
pasan la pelota
pasan la bebida
pasan del amor al odio
pasan del tiempo
pasan por lo que todos los días
pasan por ser inútiles
pasan, se acaban, mudan, sufren, suceden, omiten, intentan, olvidan
pasan del 3 de noviembre y el 10 de agosto
pasan del número 30
pasan a mejor vida

martes, 24 de noviembre de 2009

muerte: en el silencio

en el silencio
está lo que mas quiero
oculto y olvidado
por el paso del tiempo
en el silencio
están todos mis recuerdos
fundidos con el viento
en el silencio
frente a la muerte
con voz quebrando mi recuerdo
volver a verte

¡Perdona mis ausencias, pluma!
Alguna vez creí que eras bostezo
no darme cuenta, confundir
verdad distinta al pensamiento

¿Qué puedo hacer yo?
Sí me defino por ausente
de sentimiento
ante tus ojos
ante tus labios
ante tu pelo
¡dolor!
pensar no quiero
¡es sufrimiento!

Perdoname
que me conforme
[con ver de lejos
tu claroscuro de reflejos]
¿Abrazame?
¡Ocultate, vete!
verte no quiero
llorar

Y sí la lluvía cae
y el sol se pone al horizonte
a mis brazos ven
ocultate

Mentir, ¿por qué?
comprender, ¿el qué?
saber, ¿de qué?
sí a toda respuesta sólo puedo decir amor
Rendido por el sueño
de vernos, ¿donde?
de amarnos, ¿donde?
en el silencio
...
a orillas de lo eterno

¿Y pienso que sí alguien me oye
respirar?
¿Y pienso que sí todo es
vanidad?
Ya solo puedo decir
que en el principio
cuando te ví, pense
¿estoy... en el infierno?
Adios y miento
huye, no vuelvas
y gracías por [dejar de] ser
en el camino
flor de una noche
faro de luz
mi musa
- no -
mi musa
- no -

lunes, 16 de noviembre de 2009

Muerte: de lo que se es

El tránsito por la estepa que es la vida deja tocado a cualquiera. Tan tocado que no hay remedio ni esperanza para mi. En este lugar y en este tiempo no me siento identificado como ser humano, ni siquiera como ser vivo. Y es por eso que revuelvo los pensamientos y trato de anunciar mi renuncia a este lugar y a este tiempo. La pretensión de huir lejos, muy lejos de aquí, quién sabe donde, es cada vez mayor, y cada vez menos factible. El paso del tiempo hace que mis huellas sean cada vez menos profundas, cual pájaro cantor que ya no sabe sino cantar y pierde peso en su camino hacía la meta, esa que todos compartimos. La pregunta por el fin último me enerva y me llama la atención en estos días, tal vez como en ningún otro. Y eso que la experiencia ahora no me ha tocado la moral. Ahora todo reposa tranquilamente, como sí nada ni nadie nunca hubiera tocado una pieza y hubiera provocado una avalancha. Lo que alguna vez sentí está ahora lejos, muy lejos, y siento que quizás nunca vuelva, y yo seré el único que lo sufra, pues en mí soledad no dejare a nadie convertirse en amigo.

La lucha por la vida – extraña pregunta – que hace que me retuerza las entrañas no es sino la lucha hoy por hoy por ver quien es mas fuerte. Y así ha sido siempre. Parece que no ha habido progreso en la historia. Todo ha sido una triste y pésima repetición donde las cifras han ido aumentando. Y ahora, ¿ahora qué? ¿Qué me toca luchar? El mundo ha estado siempre.. y yo que soy.. una fugacidad, una criatura, un segundo del reloj del más hábil relojero.

Vuelve a la orilla estúpida nube de cromo y trata de fundirte con el más ligero viento. Sí a veces no ves al extraño pasajero frota la lampara y piensa en mí. Pide un deseo. Siempre se cumplen sí son tristes augurios que no pueden ver más que decadencia. Pero recuerda siempre mi palabra. Ten en cuenta que yo... yo... yo soy el que soy (Ex 3,13-14) .. hasta donde llega mi arrogancia.

Vida: contrato social

Voy a intentar responder a la pregunta por la necesidad. ¿Qué es lo necesario? Lo entiendo por oposición a lo contingente. Lo demás son solo dudas. Pero no puedo explicar ni comprender algo sí lo explico mediante una relación.
Sí interpreto que lo necesario es aquello a lo que no tengo mas remedio a lo que acceder, entonces será algo en contra de mi libertad, de mi posibilidad. Habría de rechazar entonces que el hombre es esencialmente libre. Creo que aceptar esta condición es indispensable: la limitación.
No creo que la limitación niegue la libertad absoluta. Las condiciones de posibilidad siguen siendo enormes, por lo que no se deja de ser libre. Se puede seguir actuando en consecuencia.
Muchos han afirmado que lo necesario es aquello que mantiene al ser humano en el ser. Es decir, lo indispensable para la vida. Esto es, todo acto biológico: nutrición. Pero, algunos revolucionarios del siglo XVIII en adelante han mostrado que la perdida de libertad desmerece la vida hasta el punto de que es preferible morir. ¿Es lo necesario, por tanto, la biología? Parece ser que esto último que afirmo acaba por negar esta posibilidad. Ahora aceptamos que la necesidad solo responde a la libertad, considerando que esta es fruto de la voluntad humana.
Sí lo que quiero es alcanzar un determinado fin tengo que aceptar que existe una necesidad de cumplir unas pautas para alcanzarlo. ¿Es la necesidad un medio? Parece que sí. Desde luego que existe en este sentido. Veamos otro.
Hasta ahora he presupuesto el libre albedrío en el hombre, ¿qué ocurre si carecemos de él? Entonces no existe contingencia alguna, somos necesariamente lo que somos o tengamos que ser. Pero rechazo esta hipótesis aún no teniendo un argumento infalible de refutación – no se conoce.

¿A qué responde la pregunta por la necesidad? A la pregunta por el sentido. A riesgo de exponerme a caer en el error me limito a aceptar que lo necesario es el amor. « Dios es amor, y quien permanece en el amor permanece en Dios y Dios en él » (1 Juan 4, 16 ). Estas palabras remiten a la repuesta para el creyente. En Dios se ama, en Dios se vive, en él todo conserva su ser sin violencia. La necesidad responde a la pregunta por Dios. Dios es lo necesario. Y, ¿para el agnóstico? La apuesta del pensamiento fuerte: la sociedad. Los otros son lo necesario. Y así se desecha el conflicto, pues todos aman al prójimo como a uno mismo. Y así superar la apuesta por la fe, enemiga irremediable de la razón.

Interludios: a la busca del sentido / conversación que se aproxima a la muerte

*creo que en mi vida cada vez me volveré mas huraño
sí continúo siendo como soy ahora
*porque no puedo evitar sentirme en conflicto con los relativistas
y esta sociedad es extremadamente relativista

¿cuál es el límite de la crueldad cuando deseamos que alguien nos ame?
Yo sabía que ella había estado intentando evadirme, sabía que había intentado amarme, besarme, abrazarme, reírse de mí o asesinar sus recuerdos para conmigo.
Yo sabía que ella necesariamente tenía que sentirse como se siente Dios cuando ama a sus hijos, quizás incluso por encima de lo divino, puesto que Dios solo nos ama racionalmente.
Lo que no sabía es que tenía que comportarme de una determinada manera para demostrarle a ella que no podía ser sin mí, puesto que no podía retenerla de ninguna otra manera.
Lo que tampoco sabía es que he estado derrochando el tiempo en esta única vida en la que puedo estar seguro de vivir odiando sin razón y desamando lo amado por miedo, pero no importa, ¿qué importa? tempus fugit

El miedo es lo que nos reprime, lo que nos hace débiles, nuestro peor enemigo, y es lo irracional.
Sí no existe moral por encima de mi, ¡que me lleven al infierno! No soporto tener tanta voluntad de poder. Quiero, deseo, un sentimiento, que me ate a ella, que me impida moverme sin que ella lo diga.
Si no existe vida mas allá de la muerte no importa. No quiero tener que cargar con el fracaso en otros mundos. Sí algún día deseo profundamente morir ¡que me encierren!, pues habré olvidado que incluso el sufrimiento de tu perdida es hermoso.

¡Qué sera de mí, pobre mortal! Sí pudiera amarte eternamente aunque no tuviera respuesta no dudes que lo haría. Pero, ¿acaso puedo yo tentar a la muerte? Sí pudiera creer en la resurrección de la carne que dichoso sería. Pero yo soy un hombre sin fe. Un apátrida. ¿Donde estaría Dios en un mundo – por supuesto ficticio – donde solo existe la desgracia de mi persona? Mi amor es una negación de la divinidad porque ya no cabe mas amor, no, esta negando.

Ya no existen pruebas. Ya todo es fruto del azar, de la casualidad. Ahora el sentido de la vida pasa por ser un fin de semana pasado por narcóticos y tranquilizantes. Mañana quien dirá. Hoy ya nadie, no. Ayer, ¿quién sino una voz? ¿quién sino la madre tierra? / ¿Qué estamos haciendo? Condenarnos. Gracias a Dios que es una cuestión temporal. Gracias a Dios que existe la muerte.

Todo lo que se refleja en las palabras índica posibilidad, infinita posibilidad, extrema. Sin esta posibilidad lloraríamos a nuestro destino trágico. Pero el fin último es siempre el último. Vivimos porque morimos.
La rueda trágica es ahora una salvación puesto que no osamos ser inmortales. ¿Quién quiere ahora la piedra filosofal? Los ricos de espíritu, los irascibles, los que no lloran, los que no tienen hambre ni sed de justicia, los inhumanos, los impuros de corazón, los que trabajan por la guerra, los perseguidores de los justos, todos los que no luchan por una causa última ex nihilo. / O quizás sean los otros. En cualquier caso es la peor decisión. Decisión irrevocable, última.

sábado, 31 de octubre de 2009

Vida: velocidad

¿Quién soy yo? Para ti ni idea excepto lo que no quieras que sea.

¿Un ego, una sustancia, un alma dubitativa? En definitiva, algo en el mundo y por y para el mundo - sin querer o no querer, independientemente. Una vez y vez y un tanto al sur del ser de la alegría - una metáfora con y/o sin comprender y comprendida por y para siempre. ¿Un eterno retorno? No, o sí y solo sí es a la vez.

Con independencia de si quizás no puedo afirmar nada. ¿y con independencia de los demás? Pero, ¿quién sobra? ¿y sí sobra quien soy yo para decir que sobra? / ¿Ahimsa? Querer quiero y deseo desear radicalidad en el ser y nunca no-ser siempre y de alguna manera.

Quien carece de un sentimiento carece de todos. ¿Qué vale y qué no vale? ¿Qué elegir? Ser o nada.

lunes, 26 de octubre de 2009

Muerte - primer acercamiento

El mundo – como la matemática – viaja desde lo infinitamente pequeño a lo infinitamente grande.

Cuando he tratado de conocer o conocerte y he visto que somos como niños jugando a los dados con nuestros pensamientos he comprendido que un instante y una eternidad son uno y el mismo tiempo.

Cuando he tratado de besarte he despertado del sueño y he comprendido que estamos eternamente alejados, que pertenecemos a universos diferentes dentro y fuera de un mismo tiempo.

Entre cigarro y cigarro he dejado correr un tupido velo que me hacía recordar la importancia que tiene para mi el sabor de lo inútil, de lo in-característico.

Al volver de mi viaje de nuestro desierto acercamiento he caído en la cuenta de que lo que tu y yo tenemos en común no importa tanto como lo que él y ella tienen en común con sus ríos de tinta acerca del movimiento de lo in-engendrado y lo realmente significado por lo grotesco.

Solo he comprendido a través de los excesos que el lenguaje y la naturaleza exacerban y me hacen reflexionar sobre lo nuestro: el pecado de no saber amar a orillas de lo eterno.

lunes, 12 de octubre de 2009

Vida: cuaderno negro

Puedo destruir el mundo para ti
si tu me dices: ¡destruye el mundo para mi!
Puedo besarte sí quieres
puedes decirme: ¡dame tu mano!

He recordado olvidar los pecados capitales
la ira, la gula, la avaricia, la lujuria,
no están hechos para mi,
prefiero la penitencia

He de llorar por las almas que lucharon
en nombre de la justicia, de la verdad,
y no del honor a la gloria, la patria,
sino en nombre de la amada libertad.

Sufro irremediablemente el no poder coger entre mis brazos,
a todas los individuos que sufren la soledad del laberinto,
que no se dejan amar sino por una luz de esperanza,
que solo quieren ser deshonrados por un Adonis de moda.
Olvidan que la verdad es eterna, universal, infinita,
que la humildad es la base del amor,
que cualquier tipo de interés que choque con la bondad,
es veneno.

Elegir: ¿lo abierto o lo cerrado? / ¿lo sagrado o lo profano?
elegir la fiesta: el derroche: la comunión: la exaltación,
elegir un proceso cósmico donde vida y muerte se confunden,
rechazar: ¡que importa la muerte sino importa la vida!

No es cuestión de fe solo la religión,
también lo es en muchos puntos nuestro pensamiento,
aquel que se encarga de movernos hacia un determinado fin,
y sin el cual no sería posible avanzar en la cultura.

¿Pero, cuantas veces olvidamos, ignoramos, ahogamos?
¿cuantas veces tropezamos en un mismo lugar?
Y todo por culpa de nuestros juicios equivocados,
fruto de una mala reflexión.

Verdad es y no es lo que nosotros pensamos
.. se oculta entre nuestras manos
Esta contenida en mi, sí es que soy el verbo
.. es seguro que no es solo yo.
El amor es incompatible con el orgullo
... no entiendo nada de lo que dices ...
solo se trata de limpiar mi conciencia
pretendo que solo lo entiendas sí lo intentas descifrar
... en serio es que no entiendo nada ...

¿Es posible una respuesta a alguna pregunta?
¿Es posible negar a Dios su no-existencia?
¿Hallar convicción y firmeza en el romanticismo?
¿Apaciguar a las bestias? ¿La ira de los dioses?
¿No sentirse solo / a solas?
... ¿Qué sentido tiene ser yo? ...

miércoles, 7 de octubre de 2009

Interludios: rutinas

A veces hay sensaciones que son como de vacío. No sabemos muy bien que nos aportan o que no. Simplemente están. Aparecen un día por alguna extraña circunstancia y permanecen allí tal vez hasta el final de la vida, o tal vez no duran mas de lo que dura un beso. Quiero decir que acaban en ese preciso instante. Y es que uno no sabe muy bien cuando ama algo, cuando lo odia, o cuando sencillamente le es indiferente. Creo que para diferenciar categóricamente estos tres sentimientos podríamos pensar en lo que nos motiva día a día. Nada más importante que la rutina; entrañable. Sin ella no podemos apreciar un viaje; una cerveza en día de lluvia a las diez de la mañana porque ya llegamos tarde a clase; una mirada descuidada a los ojos de aquella bella dama que resultaron coincidir aquel largo domingo de octubre con los de su mirada; un canuto de hierba en época de cosecha porque después se acabaran; un billete de cinco, diez o veinte euros que encontramos en el suelo pegado a un coche en aquella extraña calle por la que nunca pasa nadie y por lo cual no tenemos la obligación moral de devolverlos ya que no sabemos a quien pertenecen; y un largo etcétera de casualidades que nos pasan para que podamos recordar y contar a los amigos. Sin ella no podemos odiar a nuestro jefe, al presidente de gobierno y/o al líder de la oposición, a esa vieja vecina que siempre se queja porque no le gusta el volumen al que ponemos nuestros queridos vinilos de Pink Floyd o a nuestra madre por alargar sus conversaciones telefónicas cuando estas harto de hablar. Sin ella no podemos ser indiferentes a las docenas de miles de muertos que cada mañana de algún mes del año nos encontramos en la televisión por alguna guerra o catástrofe natural que ocurrió muy lejos de nuestras casas y por lo cual pensamos que nunca nos afectará.
Y así vamos de rutina en rutina: lloramos cuando somos pequeñas criaturas, jugamos cuando somos niños, trabajamos o vagabundeamos el resto de nuestra vida, y si llegamos a ser ancianos nos detenemos a ver las obras de la capital, a cosechar nuestro huerto de zanahorias, a jugar nuestra partida de tute o a predecir el tiempo que hará en treinta minutos mientras nos quejamos de la articulación de la rodilla. Todo esto me recuerda a aquel emotivo final que nos dejaba F. Scott Fitzgerald en El Gran Gatsby: “Gatsby creía en la luz verde, el orgiástico futuro que, año tras año, aparece ante nosotros... Nos esquiva, pero no importa; mañana correremos más de prisa, abriremos los brazos, y... un buen día... Y así vamos adelante, botes que reman contra la corriente, incesantemente arrastrados hacia el pasado”.

martes, 6 de octubre de 2009

Interludios: personas solitarias

Escribo estas reflexiones en prosa bajo demasiada luz. Siempre es demasiada luz cuando se trata de luz artificial. Me encuentro algo cansado, pero ya va siendo algo personal frente a este mundo. Me encuentro con que pienso demasiado, respiro demasiado, escribo demasiado poco y me considero demasiado a mí mismo. Sí digo todo esto es porque ahora lo pienso, ya que mi realidad siempre es esa de prisas, de desengaños, de arenas movedizas. Si analizo ahora lo que quiero es paz, paz, siempre paz. Creo que eso nunca cambia. No es nada más que tranquilidad (en el fondo: aislamiento). ¿Y, por qué tengo que sentirme culpable?

Hoy la realidad es bella, dulce cisne. Pero, yo a veces me aburro.
Hoy el día amaneció sin nubes, de color azul. Y no he prestado atención.
Hoy la felicidad me atrajo porque encuentro algo de rutina.
Hoy.. hay tantas cosas que decir que nunca voy a decir.

Me estoy matando porque no quiero morir en vuestros corazones. ¿Es tan extraña petición el querer ser uno mismo? Para eso necesito ser extremadamente libre. Por eso os incito al olvido. No quiero haceros sufrir, porque os quiero. Pero no hagáis caso. Todo es una broma; una indescriptible broma llamada vida.

martes, 11 de agosto de 2009

Versos apátridas

Dios, en su eterno sueño / nunca supo que le odiaba / no puede saberlo, conocerlo todo, / y niego que esculpiera mi mente

Rojo y negro o tal vez azul / el color subjetivo de la vida / el no poder ser juez de paz / culpa de este maldito mundo fenoménico

¿Seguro de mi mismo? / ¿Del mundo real? / Yo no puedo asegurar haber oído / la voz del camino

La idea era representar al hombre / desde Jerjes hasta Judas / yo como puro ego / yo como borgiana salvación

Lo tercero es un mero juego / no existe certeza ni en filosofía / ni en el amor, ni en la ética / de contar con los otros

El pensamiento de la alteridad / no es mas que evolución / de dos amantes / que todo quisieron compartir

¿Los ídolos han muerto? No / , ahora son mortales, / creen ser inmortales / desterrar a Dios / No hacen caso de Cronos / que aunque se encuentre aletargado / por nuevas drogas revitalizadoras / nunca olvida a Hades

He encontrado la circularidad, el eterno retorno / ahora puedo reirme de Occidente / de sus prisas por ser siempre / aún borrando su memoria / Pero no he evitado caer en el nihilismo, / siento haber fracasado, / aunque tengo tiempo/ de volver a vagar por el desierto.

lunes, 10 de agosto de 2009

visiones paralelas (que nunca se tocan)

El mundo del cine esta lleno de imágenes únicas e irreconciliables con la vida. En la literatura de masas también ocurre. En la música; en la visión elitista de las modas; en la política revolucionaria; en la publicidad; en el mundo de las apuestas deportivas; en los mmorpg, en las revistas de corazón; ...

En el universo aristotélico no ocurren amores de Hollywood ni guerras de dominación mundial de manos extraterrestres. Tampoco ocurren transmutaciones, milagros, tele-transporte y otras cosas varias.
En el universo aristotélico ocurre lo expresado por Dios. Ocurren amores y guerras de hueso. Hay una gastronomía y una festividad popular, un paisaje, unos rincones vírgenes excepto para dos niños que encuentran por primera vez la pasión. No hay trampas en esta naturaleza.

¿Que prefieres? ¿El amable cuento y la vida desordenada, desorientada, decepcionada por el imposible? ¿No prefieres mejor la ley de la gravedad?

las cosas importantes de la vida

¿El amor? ¿La libertad? / ¿Acaso no son términos contradictorios? Como reflejaba Pirandello a través de su difunto para que uno se acerque otro ha de alejarse. Si el destino del hombre en los tiempos que corren es su exacerbada lucha por la libertad; la lucha por el extremo individualismo al que Spencer pretendía llevarnos; ¿como vamos a ser capaces de amar?

¿Y si tenemos que elegir que elegiremos? ¿Acaso no eligieron ya por nosotros? Creo que el amor ha desaparecido. La libertad nos corroe. Nos empuja a rechazarnos. A disentir.

¿Que son los otros? El objeto amado es el espejo. Pero no hay tiempo. Demasiadas revoluciones nos laten para ser capaces de amar verdaderamente. Tenemos demasiadas prisas. Como siempre nos fuimos al extremo y allí nos perdimos. Irreconciliables. Escandalizados.

jueves, 23 de julio de 2009

23 de Julio

Hoy me levante sobre las 8 de la mañana, y de nuevo a los 10 o 15 minutos. El despertador siempre suena dos veces porque a mi me gusta mucho dormir.

Había una magdalena industrial en el desayuno, acompañada de un mucho de café y un poco de leche desnatada. No recuerdo haber comido mucho mas, quizás un poco de fruta, algo de melón o de sandia.

Después estuve por los alrededores dando una vuelta y volví a casa sobre las dos de la tarde. Fue una vuelta larga donde hice unas y otras cosas que no son muy interesantes. Tienen algo que ver con el trabajo y por eso incluso agobia hablar del tema. No soy muy trabajador. Tampoco me importa ser pobre así que no hay mayor problema. Ahora el estado apoya a gente que es como yo, así que podemos vivir o lo que sea.

Por la tarde ha sido la contrarreloj del Tour de Francia. Este año ha sido un poco aburrido en lo deportivo. Ha habido mucha polémica pero no ha habido mucha competencia. A veces en los deportes individuales hay un claro dominador y resta interés al asunto. Es algo así como elecciones con partido único.

Ahora estoy escuchando Miles Davis mientras cuento las anécdotas que ocurrieron a lo largo del día. Esta música crea estados de animo que no se pueden explicar con palabras. Lo mas cercano es algo caótico y impersonal, como naturalezas muertas.

domingo, 7 de junio de 2009

Sentencias

[De lo que se trata es de ver el tiempo subjetivo como algo que esta ahí, algo que aunque fugaz se da siempre en nosotros. Lo que recordamos, lo que somos, siempre se da, y pensar que uno ya no es o que uno es más de lo que es - que de repente pretende ser alguien saltándose las leyes naturales de la noche a la mañana - no es una actitud que goce de coherencia]


Uno vive para decir que vive, para comunicarse, y ni siquiera es eso tampoco.


Puede que este equivocado pero el profeta dijo: "Bienaventurados los pacíficos porque ellos serán llamados hijos de Dios"

No ver el mundo alrededor y pensar que la guerra no afecta a tus sentidos y al horizonte de tu pensamiento es no querer ver. Ya dice el pueblo: "No hay mas ciego ..."

A ese camino es donde uno ha de conducirse: a la búsqueda de la paz.



La diferencia estriba en que nosotros no luchamos por lo que ellos luchan. Nosotros no
luchamos por nada porque no hay nada por lo que luchar. El mundo es tal y como es.