El mundo del cine esta lleno de imágenes únicas e irreconciliables con la vida. En la literatura de masas también ocurre. En la música; en la visión elitista de las modas; en la política revolucionaria; en la publicidad; en el mundo de las apuestas deportivas; en los mmorpg, en las revistas de corazón; ...
En el universo aristotélico no ocurren amores de Hollywood ni guerras de dominación mundial de manos extraterrestres. Tampoco ocurren transmutaciones, milagros, tele-transporte y otras cosas varias.
En el universo aristotélico ocurre lo expresado por Dios. Ocurren amores y guerras de hueso. Hay una gastronomía y una festividad popular, un paisaje, unos rincones vírgenes excepto para dos niños que encuentran por primera vez la pasión. No hay trampas en esta naturaleza.
¿Que prefieres? ¿El amable cuento y la vida desordenada, desorientada, decepcionada por el imposible? ¿No prefieres mejor la ley de la gravedad?
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